23 enero 2018

Devociones no oficiales de la Región Ica




Beatita de Humay

Melchorita

Rosita de Pachacutec, imagen retocada y convertida en personaje de manga japonés


Devociones populares
Chicho 
Devociones populares
Culto a José Luis Tipacti -Chicho- , niño que falleció aplastado por un muro en el terremoto del 2007


Existe el Perú formal; una nación que tiene leyes, instituciones y una religión mayoritaria -la católica- que comprende templos, ritos y una vasta jerarquía eclesiástica. Pero en el corazón de ese Perú formal hay otro país. Uno que no figura en planilla, que sigue sus propios códigos y que también expresa su fe a través de devociones no reconocidas -e incluso reñidas- por la Iglesia Católica. Es el Perú de los “santos” populares.

En nuestro país abundan los personajes místicos y los objetos “milagrosos”. En el distrito pisqueño de Humay -en la región Ica-se venden, por ejemplo, unas ollitas de barro que, según los creyentes, curan las enfermedades y evitan que falte la comida en el hogar. Son réplicas de una olla que habría pertenecido a Luisa de la Torre Rojas, la ‘beatita’ de Humay (1819 - 1869). Aunque su proceso de beatificación está paralizado desde hace años, eso no impide que cientos de fieles peregrinen dos veces al año al pueblo donde nació, vivió y murió Luisa, ubicado a la altura del kilómetro 38 de la carretera Los Libertadores.

Y algo más al sur, en el centro de la ciudad de Ica, Edith Peñavásquez, la madre de José Luis Tipacti, el niño Chicho, conserva unas canicas que también tendrían propiedades extraordinarias. Según contó Edith a El Comercio el año pasado, las canicas de su hijo fallecido ayudan a los comerciantes a vender su mercadería.

El culto al niño Chicho, quien falleció aplastado por una pared en el terremoto del 2007, ha crecido desde la tragedia. Sus fieles han instalado una capilla en el lugar donde murió, a una cuadra del Templo de Luren. El lugar está adornado con cientos de fotografías de personas que han pedido deseos a Chicho o que le agradecen por uno concedido. Edith, la madre, recalca que no es su hijo quien realiza los milagros sino Dios a través de él.

En Ica también se le rinde culto a Melchora Saravia Tasayco, la Melchorita (1897 - 1951) y a Julia Rosa Muñante Milos, Rosita de Pachacútec (1966 - 1974). 

Extracto de EL COMERCIO
Fotos: El Comercio.